Ya van apareciendo setas por los bosques sorianos. Pocas, pero hemos cogido senderillas, alguna lepiota y bastantes champiñones.
Freímos una buena sartén con todas juntas, aderezadas con ajos y un poco de guindilla. Teníamos un repollo que habíamos comprado a un hortelano vecino y se nos ocurrió rellenarlo con la fritada. Hay que cocer unas hojas enteras –tantas como rollos queramos hacer- en agua hirviendo y sal, luego escurrirlas sobre un trapo y cortarle la parte del tronco para poder enrollarlo. Sin más complicación, se coloca dentro la fritada de setas y se envuelve como si fuera un rollito primavera, o sea, doblándola por todos lados para que no salga el relleno.
A partir de ahí, cada uno que continúe según su imaginación. Nosotras los impregnamos de harina y lo freímos en aceite bien caliente para dejarlo crujiente.
Pero también puede hacerse al horno, con salsa, guisado, en fin, según el gusto y el tiempo de que se disponga.
jueves, 24 de enero de 2008
Rollos de grumo con setas
en 6:15
Etiquetas: Recetas Sencillas
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